Principales causas y síntomas del espolón calcáneo

Ago 6, 2021

En este nuevo post del blog vamos a ver las principales causas y síntomas del espolón calcáneo. Se trata de calcificaciones producidas en el talón consecuencia, generalmente, de una fascitis plantar crónica. Los estudios de la pisada y el uso de plantillas son esenciales en el tratamiento y en la prevención de estas patologías. De la  fascitis plantar ya hablamos en este otro post del blog

¿Qué señales de alerta tenemos que valorar? La más importante es sentir dolor al apoyar el talón en el suelo. Un dolor punzante e intenso es indicativo de que se pueden padecer espolones, la denominada exóstosis calcánea.

Esta patología puede derivarse de una fascitis plantar. Es la inflamación de la fascia plantar, el tejido que une el talón con los dedos de los pies. La fascitis ha de ser tratada lo antes posible en Fised Therapy. Si no lo hacemos puede derivar en el espolón.

Causas de los espolones

Se trata de una calcificación que origina una excrecencia ósea puntiaguda sobre el calcáneo, parte inferior del hueso del talón. La principal razón es una fascitis plantar crónica. Lo que pasa es que el organismo acumula calcio en las zonas dañadas para recuperar el tejido. 

Síntomas del espolón calcáneo 

El básico es dolor en el talón y sensación de pisar un clavo. Este dolor se calma con reposo pero aparece de nuevo al apoyar el pie en el suelo o al hacer deporte. 

Diagnóstico y tratamiento

Se puede diagnosticar con una radiografía lateral del calcáneo para visualizar la protuberancia orientada hacia los dedos (de entre 1 y 5 mm).  Puede hacerse además un análisis de sangre que descarte enfermedades como artritis reumatoide, espondilitis anquilosante o gota.

Opciones de tratamiento: 

  • Frenar o disminuir la práctica de actividad física
  • Aplicar calor, frío o ultrasonidos para disolver calcificaciones
  • Medicamentos (vendajes con pomadas de cortisona, anestésicos locales o antiinflamatorios) 
  • Uso de taloneras con orificios o plantillas ortopédicas personalizadas que sirvan de apoyo y reduzcan la carga que soporta el arco del pie
  • Cirugía si ninguno de los tratamientos anteriores da resultado

Otras opciones son las férulas nocturnas, la acupuntura, los ejercicios de estiramientos (indicados por un entrenador personal cualificado) y las infiltraciones de fármacos antiinflamatorios.

También te puede interesar:

Abrir chat
Hola ????
¿En qué podemos ayudarte?